Explosión en oficinas de INDRA: El atentado que sacudió las elecciones de 2017 en Argentina

En agosto de 2017, la tranquilidad de Puerto Madero, uno de los barrios más exclusivos de Buenos Aires, fue interrumpida por un violento suceso que impactó tanto a la opinión pública como al proceso electoral en marcha. Un paquete bomba explotó en las oficinas de INDRA, la empresa española contratada para realizar el escrutinio provisorio de las elecciones primarias (PASO) y generales de ese año. La explosión dejó dos heridos, uno de ellos la recepcionista que abrió el paquete.

El papel de INDRA en las elecciones de 2017

INDRA, especializada en informática, había firmado un contrato de 25 millones de dólares con el Estado argentino para supervisar el conteo de votos. Este acuerdo la posicionaba en el centro del sistema electoral, haciéndola un objetivo de alta relevancia. La empresa iba a desempeñar un rol crucial en las PASO y las elecciones generales, garantizando la transparencia y la velocidad del escrutinio provisorio.

La explosión: un ataque cuidadosamente planeado

El artefacto explosivo, transportado por un cadete de mensajería, detonó al ser abierto, y, aunque no resultó en muertes, provocó lesiones en dos personas. Las primeras investigaciones revelaron que el explosivo fue ensamblado por alguien con experiencia en la fabricación de este tipo de dispositivos, lo que sugería un ataque deliberado y bien planificado.

Investigación y teorías: la búsqueda del responsable

La investigación del caso estuvo a cargo del juez Daniel Rafecas, quien asumió la responsabilidad de esclarecer el atentado. A pesar de la detención inicial de un sospechoso vinculado por un chip de teléfono, pronto se descubrió que no tenía relación con el hecho, y, hasta la fecha, no se ha identificado a los responsables del ataque. Ningún grupo se adjudicó el atentado, lo que ha dejado la motivación del ataque abierta a la especulación.

Patricia Bullrich y la hipótesis de los grupos extremistas

En su rol de ministra de Seguridad, Patricia Bullrich confirmó que una de las principales líneas de investigación apuntaba a grupos extremistas, específicamente «anarquistas o veganos». Bullrich explicó que el análisis del atentado se encuadraba dentro de una estrategia antiterrorista más amplia, que estaba siendo implementada tanto en la Ciudad de Buenos Aires como a nivel nacional.

Este ataque ocurrido durante el gobierno de Mauricio Macri, identificado con la derecha política, plantea una coincidencia intrigante con otros actos violentos atribuidos a sectores de ideologías opuestas. Sin embargo, el caso sigue abierto y sin respuestas definitivas.

Consecuencias en el proceso electoral

El atentado contra INDRA generó preocupación sobre la seguridad en torno al proceso electoral de ese año. Si bien el escrutinio provisorio se llevó a cabo como estaba previsto, el incidente dejó en evidencia las vulnerabilidades en la infraestructura electoral y despertó interrogantes sobre posibles ataques futuros.