La ex subprocuradora de Entre Ríos, que como tal coordinó al grupo de fiscales que investigó al exgobernador Sergio Urribarri y fue destituida de su cargo por haber “perdido el atributo de objetividad”, sostuvo que su remoción obedeció a una estrategia de impunidad.
En diálogo con Lorena Maciel y Nilda Sarli en Futuro Imperfecto, por Radio con Vos, consideró que su remoción en la causa contra el ex gobernador de Entre Ríos fue “simplemente la búsqueda de una excusa” para excluirla de la investigación”. Y agregó: “Había un objetivo más grande de lo que era mi situación en concreto. Si bien yo estaba llevando adelante esa acusación, tuvieron la esperanza la esperanza de que destituyéndome, Uribarri no sería condenado”.
Goyeneche argumentó que la especulación por parte de la defensa de Uribarri fue que su salida del caso generara que “se desbaratará la acusación y también infundir temor al resto de los fiscales que quedaban en la causa. Por suerte en Entre Ríos hay muchos jueces y fiscales íntegros y esto no pasó”.
La ex fiscal destacó que la condena contra Uribarri era inevitable ya que la prueba era “demoledora” y esta es la razón por la cuál se determinó su detención.
“A Uribarri se lo condena por cinco hechos de corrupción y un delito que constituye un robo a la administración pública. Uribarri sustrajo un dinero en beneficio de los ciudadanos para intereses propios”, afirmó Goyeneche.
Consultada sobre el modus operandi de Uribarri para cometer estos ilícitos, la exfiscal explicó que el exgobernador habría creado una empresa familiar adonde dirigió todas las contrataciones del ministerio de Cultura. “Esas contrataciones luego eran prestaciones que no se hacían y así se llevaban directamente el dinero”, sostuvo.